Será que es posible cambiar nuestra actitud, mejorar nuestros malos hábitos ¿podemos adquirir la disciplina que necesitamos?, como me ha pasado ya otras veces he presenciado una muestra más que el ¡sí se puede! existe, pero sigo pensando que no esta al alcance de los comunes mortales que habitamos el mundo...
Hoy, en una más de mis "involuntarias" y vanas actividades con las que postergo lo ya casi impostergable, observé, al principio sin ningún interés, el juego de vóley entre Japón y Polonia. Todo parecía definido luego de que en los dos primeros sets, aunque con algo de dificultad, Polonia se haya impuesto. Paralelamente pensaba en mi cruda verdad motivada por el momento, no importa lo ordenado y perseverante que seas, ni el tiempo que gastes perfeccionando tus limitadas habilidades, si después de todo te enfrentas a un oponente con más aptitudes naturales, con mayor capacidad natural, con más talento y con una preparación razonable, no habrá mucho que se pueda hacer; de esta forma intentaba justificar mi actitud y recostado en un mueble, casi a punto de dormir, concluía que esto era un especie de selección natural, que estaba bien que los más aptos sean superiores, que a los demás nos tocaba ajustarnos a la situación y pasar una mediocre existencia...